Anhelo

Te anhelo tanto, tanto como el último trago de café,
Como la primera sonrisa de la mañana
Y la última cosquilla del atardecer.
Te anhelo porque puedo, porque me hace bien
Porque te extraño, pero no lo hago al revés
Te quiero y es lo lindo de vos
Porqué puedo dejar de amarte
Pero de quererte está difícil corazón.

Ya no me importaste vos.

Era un mundo cruel, sin princesas
donde la corona la llevaba la pobresa
Era un mundo cruel y sin certeza
donde las caricias era la mayor grandeza
rica la abundancia de sonrisas regaladas
de suspiros de extraños fingiendo conocerse
enamorarme de tu costumbre de hacerme daño
acostumbrarme a decir que si sin pensarlo
haciendo me amiga del dolor
sin pedirte permiso, ya no hay elección
y que bueno que ya se acabo
porque sin pedirte permiso
y sin tener opción
de la nada y por tu culpa
ya no me importaste vos.

Recortes

No es fácil caer en la cuenta y ver
Como la pintura se despinta y queda al revés
La receta salió fallida
Saliste en busca de unos pantalones cortos, los mismos que en el cajón se guardaban para despues
Y quedaron guardados en los bolsillos, la fantasía que siempre pendio de un hilo,
Y los recortes de revistas, de una relación predilecta.
Y siempre con el recuerdo de una vida perfecta, y de mi amor con ganas de otro amor, y el fracaso de novela.

Tu recuerdo

De esos abrazos inesperados
tristes como el alcohol
vacías como las sonrisas que nunca dimos
recuerdos de esas miradas perdidas
agotadas sin voz, sin aliento
y casi sin vida
De esos abrazos inesperados
tristes como vos
vacíos sin alma
y tan lejanos como el sol
ricos en agonía
pacientes como cargando una cruz
con una resina entre los labios forzando a un adiós
Ese es tu canto,
Ese es tu abrazo,
tu recuerdo me agota,
Tu recuerdo, me recuerda, que ya no hay vos.

Tampoco creo.

Sino sabes cuánto te amo y tampoco lo que es amar
No puedes decirme que no te ame, asi como si nada, asi sin más
No tiene explicación la dulzura de mirarte
Ni el hueco de tu cintura, ni tus gritos infernales,
No tiene explicación besarte debajo de una butaca,
ni tampoco las mariposas de tu panza
Dormirme con el pensar, que al despertar amanecere pensando en ti
Esperanzarme creyendo que volverás con esa imagen de niña ilusa que se traga el mundo
Creo en lo que fue, creo que será, y creo que aún quiero amarte otro rato más.

Gracias.

Que caros los precios de un corazón roto
Que cara la locura sin escrúpulos ni terremotos,
Fue mi elección perder, quererte y volverme de vidrio
Fue mi elección de pago romperme los brazos
Fue la locura sin condena, más larga que el invierno sin vos
No te extrañó, no te necesito
Y gracias, en serio, de corazón
Gracias.